por Akira Dom Jul 18, 2010 2:23 pm
El recién llegado tomó asiento cerca de donde estaban Vlad y Akira. El peligrís observó cómo Ryo le entregaba una pequeña ampolla alargada llena de un líquido rojizo. Los ojos del hombre se iluminaron al contemplarla, y rompiendo su cuello de cristal, se la tomó toda de un trago.
- Deberías tener más cuidado, Yuto -habló el mesero- Si te pasas con el Rain puede que no llegues al día de mañana.
- ¡Yo sé lo que me hago! -respondió el tipo- Esto es como el agua, tío, mi cuerpo está hecho para esta mierda.
- ¿Tú te has visto la cara, tío? -insistió el mesero- Un poco más y pareces un zombie. En cualquier momento te va a explotar la jeta...
- ¿Has visto todas esas chapas? -interrumpió el yonki, señalando a las que acababa de dejar sobre la mesa- Las he conseguido gracias al Rain. A este paso no tardaré en conseguir una Escalera Real y desafiar a Il-Re. La mierda es que me faltan el Rey y la Sota de corazones... maaaaah, este juego se hace muy pesado a veces.
Akira dio un pequeño bote al escuchar aquello, al tiempo que sus ojos se abrían a la par, aunque intentó disimular bien su nerviosismo. Se subió la cremallera de la chaqueta, escondiéndose aún más la valiosa dogtag y fingiendo normalidad.
Además, ¿qué era eso del Rain? Parecía algún tipo de droga... fijándose bien, Akira pudo ver en aquel tipo que todas las venas de su cuerpo estaban exageradamente grandes y marcadas.
- Vámonos de aquí -murmuró Akira a su compañero.